Las «bolsas verdes» están diseñadas para frutas y verduras que maduran por la producción de la hormona vegetal, el etileno. El gas etileno es producido en grandes cantidades por ciertas frutas, sobre todo los plátanos. A medida que aumenta la concentración de gas etileno en un ambiente cerrado, la fruta madura más rápido. La eliminación del etileno ayuda a evitar que las frutas maduren demasiado rápidamente. Las bolsas verdes están hechas de un polímero que permite el escape del gas mientras mantiene otros, y algunas de ellas utilizan aditivos a la película para absorber otros gases que promueven la maduración o el deterioro.

Las bolsas verdes funcionan para ciertos tipos de productos. Algunas advertencias: la vida útil se prolonga siempre que el producto esté muy seco (el crecimiento de moho parece ser un problema en los productos húmedos). Además, las bolsas tienen una vida útil y solo se pueden reutilizar 10 veces. Si tiene la intención de comer un producto rápidamente, por ejemplo, fresas, es posible que no tenga sentido económico usar la bolsa verde cuando la película de plástico normal funcionaría.

-Contribución de Sam Beattie, Especialista en Extensión de Inocuidad Alimentaria de ISU